¿Quién ha causado terror en tu vida?

Para cada persona la respuesta es diferente. Para mí, esta es mi historia.

En 1979, en la Ciudad de San Salvador, de mi amado país El Salvador, a mis 16 años de edad, a las 8 am. de la mañana, estando en mi colegio, la Madre Directora me aviso que mi padre (quien funcionaba como Ministro de Educación de El Salvador) había tenido un accidente y por lo cual debíamos de ir a nuestra casa. La Madre Directora del Colegio y mi tía Chusita (maestra de manualidades) nos llevaron a mi hermana Alicia de 13 años y a mí a nuestra casa. La sorpresa que lleve es que todas las personas que se encontraban en nuestra casa estaban vestidas de negro y blanco.

Al recordar ese día, mi memoria me hace pensar en mi madre vestida de negro y llorando desconsoladamente por la muerte y asesinato brutal de mi padre a quien tanto amaba y amábamos nosotros sus hijos, A mi abuelo (Padre de mi papi) hablando con mis tíos del ataúd que comprarían para enterrar a mi papi, muchas personas vestidas de negro y blanco entrando y saliendo de nuestra casa. Mi hermana menor de 5 años preguntando qué pasaba y a donde estaba nuestro papi. Mi hermana mayor de 17 años con lágrimas en los ojos tratando de explicarle. Mi abuelita (madre de mi mami) vestida de negro, llorando y cocinando, sirviendo y tratando de animar y cuidar a sus nietos que estaban desconsolados. Todo este escenario sin palabras de nadie me gritaron y dijeron TU PADRE ESTA MUERTO. Minutos después, fui al televisor el cual estaba prendido y en donde observe el dolor inmenso de mi madre cargando a mi papi ensangrentado y muerto a disparos causados por las manos de hombres llenos de odio en su alma.

Esperamos que trajeran su cadáver y lo velamos en la casa comunal, lugar que el como alcalde de la ciudad de San Salvador, había construido hace varios años para la comunidad de la Colonia Universitaria. Cumplimos su deseo de ser velado en ese lugar junto al cadáver de su amigo y motorista fiel Don Fabio. Horas después lo fuimos a enterrar en el Cementerio General de San Salvador. Miles de personas nos acompañaron, ricos y pobres. Conocidos y desconocidos. Gente del mercado a quien él amaba y respetaba y llamaba amigos. Y aun el Presidente de la Republica y amigo General Romero se hizo presente.

Después de este entierro y reaccionando al terror causado en mi vida por personas desconocidas, pero que se habían hecho notorias al asesinar a mi padre, me desmaye y caí en un profundo sueno del cual desperté en dos días. Durante un ano mi vida estuvo vacía, no le hallaba sentido a nada, para que y porque vivir? me preguntaba. Un ano después un pastor que le había predicado a mi papi nos compartió del Señor Jesucristo. El explico que Jesús era el único camino para poder llegar al Padre del Cielo. Fue así que yo acepte a Cristo, yo necesitaba a mi Padre Eterno que nunca me abandonaría y dejaría sola. Yo necesitaba esa seguridad que solo El me podía dar. Dios con su poder quito el terror que esta experiencia había provocado en mi vida y en mi alma. El cambio el terror en Esperanza, en Fe y en Amor. A partir de ese día mi vida cambio, Dios mi Padre del Cielo es Real, ha sido, es y será Fiel en cada minuto de mi vida, de la vida de mi madre, de mis hermanos, mi esposo y mi hija.

Esta historia es verdadera, causo terror en mi vida. Pero la muerte de mi papi, como dijo nuestra madre será juzgada por nuestro Padre Celestial, El todopoderoso, Justo y Sabio a quien hemos confiado nuestras vidas a través de su hijo Jesucristo y por medio de El podemos ser llamados sus hijos.

Como seres humanos queremos que se haga justicia. Solo recordemos que Dios es el TODOPODEROSO, JUSTO, SABIO, JUEZ DE JUECES Y SENOR DE SENORES. El hará la justicia por ti, reposa en sus manos y ya verás. Salmo 23

Es tiempo de enfatizar en quien tiene el poder para quitar cualquier terror que haya sido implantado en tu vida.

Busca al Padre Eterno, a Dios Todopoderoso y hallaras la respuesta en tu vida. Jesucristo es la respuesta, Él es el Único camino para llegar al Padre Celestial. Dedícate a amarlo, a adorarlo, a obedecerle, a servirle con todo tu corazón y veras el cambio que Él te dará.

Hechos 20:24

Ana Celina Herrera R. de Willis

21 de mayo de 2009

Vea también los testimonios de:

Ana Celina: Desde El Salvador al mundo: ¿Quién ha causado terror en tu vida?

Alicia:  Desde El Salvador al mundo: ¡Murió mi héroe! ¡murió mi papá!

Carlos: Desde El Salvador al mundo: Carta a quien asesinó a mi padre

Susy: Desde El Salvador al mundo: El perdón es posible